La exposición está dedicada a uno de los artistas más importantes de los siglos XX y XXI, Anselm Kiefer, permitiendo así al visitante entrar en contacto directo con el gran maestro alemán a través de un viaje entre obras históricas y nuevas producciones, incluida una nueva gran obra, creada en diálogo con el patio renacentista.
El itinerario expositivo es un recorrido a través de alegorías, figuras y formas que reflexionan sobre la identidad, la poesía, los acontecimientos históricos y diferentes pensamientos filosóficos. Utilizando pintura, escultura, instalación y fotografía, el arte de Anselm Kiefer ofrece un camino de introspección sobre el ser humano, explorando las conexiones entre pasado, presente y futuro. Desde su debut a finales de los años 60, Anselm Kiefer ha llevado a cabo investigaciones profundas y estratificadas sobre los temas de la memoria, el mito, la historia, la literatura y la filosofía. En su trayectoria artística se unen el mito, la religión, el misticismo, la poesía y la filosofía. Cada una de sus producciones artísticas expresa el rechazo de los límites, no sólo en la monumentalidad o la materialidad sino sobre todo en la infinita riqueza de recursos con los que sondea las profundidades de la memoria y el pasado.