Declarada por la UNESCO Patrimonio mundial de la Humanidad en 2013, la villa medicea de la Petraia es una de las más fascinantes por su afortunada colocación en el paisaje, por la excelencia de las decoraciones pictóricas y por la exuberante naturaleza del parque, típica residencia suburbana y refugio para los grandes duques de la familia Médicis de las fatigas de la ciudad. La Villa de propiedad de Cosme I desde la primera mitad del siglo XVI, se erige con su inconfundible torre en posición dominante en las laderas del Monte Morello que descienden hasta la llanura con una espléndida panorámica de Florencia. El jardín formal se desarrolla en tres niveles de terrazas aprovechando la pendiente del sitio: terraza de parterres, terraza de viveros y terraza de la “figurina” y mantiene todavía intacta la espacialidad geométrica del original jardín del siglo XVI. El patio de la villa, cubierto en el siglo XIX, está decorado con frescos de Volterrano y de Cosimo Daddi que celebran las glorias de la familia Médicis. En las salas se pueden admirar los originales de las esculturas de bronce de Giambologna de Venus-Fiorenza y el espléndido grupo de Ammannati con la representación de Hércules y Anteo que coronan las fuentes del Jardín de la villa de Castello y las 14 lunetas supervivientes de Giusto Utens, que representan las Villas mediceas.